lunes, diciembre 2, 2024
MUNICIPIO

La Universidad de La Matanza será sede del juicio por jurados por el crimen de Lucas Verón

(Por Matías Bergés) Dos policías bonaerenses serán juzgados hoy en un juicio por jurados que se realizará en la Universidad de La Matanza, como acusados de matar de un balazo a Lucas Verón, el joven que en su cumpleaños fue asesinado durante una persecución en la localidad de González Catán, en julio de 2020.

“Espero que se haga justicia como corresponde, que la Justicia realmente se haga responsable de estos tipos de actos, de una buena vez, para que no tengamos que estar sufriendo en los barrios todo este tipo de situaciones”, dijo Cristian Verón, padre del joven asesinado.

El debate oral se realizará abierto al público en el Patio de las Américas de la Universidad Nacional de La Matanza y dará inicio al mediodía.

Voceros judiciales informaron a que previamente se llevará a cabo la elección de 18 miembros de la sociedad civil que conformarán el jurado popular, 12 de los cuales serán titulares y deberán definir si los entonces policías Ezequiel Benítez y Cintia Duarte son culpables o inocentes.

Benítez y Duarte son dos agentes del Comando Patrulla de La Matanza (actualmente desafectados) de la Policía de la Provincia de Buenos Aires y llegan al juicio detenidos con prisión preventiva, acusados de “homicidio agravado por ser cometido por un miembro de una fuerza de seguridad y por el uso de arma de fuego y tentativa de homicidio”, en el primer caso de Verón (18) y en el segundo de un adolescente que lo acompañaba.

De acuerdo a lo informado, luego del ingreso del público el juicio dará inicio con los alegatos de apertura a realizar por las partes y posteriormente será el turno de los testigos, de los cuales se espera que puedan llegar a ser unos 30.

En representación del Ministerio Público Fiscal estará Sergio Antín, mientras que los padres del joven serán patrocinados como particulares damnificados por abogados de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), organismo que acompañó a la familia durante todo el proceso. En tanto, dos defensores oficiales representarán a los expolicías.

Las fuentes señalaron además que se tiene previsto realizar el debate en una sola jornada, por lo que la audiencia podría prolongarse hasta la madrugada del miércoles.



Por otro lado, los voceros explicaron que al ser sometido a debate un delito cuya pena en expectativa es la de prisión perpetua, la decisión del jurado debe ser unánime, es decir, los 12 miembros deben votar por la culpabilidad de Benítez y Duarte.

Cristian Verón, padre de Lucas, dijo hoy a Télam que, de cara al inicio del juicio, “las expectativas son muchas” y que como familia quieren “que se haga Justicia, que paguen realmente sus culpables, por lo que hicieron, y todos los que quisieron encubrir”.

“Es una fecha muy especial, se vienen un montón de cosas, recuerdos, imágenes, momentos vividos con nuestro hijo”, señaló Cristian.

El hecho ocurrió en la madrugada del 10 de julio 2020, cuando Verón, que festejaba su cumpleaños 18, se dirigió a bordo de una moto junto a su amigo Gonzalo rumbo a un kiosco situando en Calderón de la Barca y La Bastilla, en el barrio de Villa Scasso de González Catán, para comprar unas gaseosas.

Sin embargo, en el trayecto, un patrullero con las luces y sirenas apagadas comenzó a perseguir a los jóvenes, según lo acreditado en la causa.

En la esquina de Domingo Achega y Juan C. Llerena, el vehículo policial, ocupado por los agentes de la policía bonaerense Benítez y Duarte, embistió a Lucas y a Gonzalo por detrás, provocando que ambos cayeran al suelo. 

Por miedo y aún con los golpes por la caída, ambos comenzaran a correr en dirección a la casa de uno de ellos, ubicada a una cuadra y media.

Pero allí, aparentemente el policía que manejaba la patrulla, Benítez, descendió y efectuó entre dos y tres disparos con su arma reglamentaria calibre 9 milímetros, uno de los cuales impactó en Verón.

De acuerdo a los voceros judiciales, los efectivos huyeron de la zona sin dar aviso, mientras que Lucas cayó al piso gravemente herido, por lo que su amigo fue a avisarle a la familia, que lo llevó al Hospital Simplemente Evita, donde finalmente falleció.

Según la autopsia al cuerpo del joven, el disparo ingresó por el tórax y salió por la espalda.

Las detenciones de los policías se concretaron horas después del crimen, tras las declaraciones de los testigos y de la información suministrada por el GPS del patrullero, que lo ubicó en la zona donde ocurrió el homicidio.