domingo, abril 28, 2024
CONURBANO

Una tarde de “mates” y a puro ajedrez en Morón

Contó con la presencia de un Gran Maestro

Créditos: Andrés Pelozo

Ayer por la tarde la Escuela Municipal de ajedrez “Roberto Grau” de Morón abrió sus puertas para brindar una serie de partidas, como lo hace habitualmente, para todos los presentes que se acercaron de diferentes barrios.

Contó con la presencia del Gran Maestro, Carlos Obregón, que pasadas las 21h seguía analizando jugadas.

Carlos es un Gran Maestro de ajedrez, con un Elo 2506 (ranking de jugadores) es Argentino, vive en Buenos Aires y es estudiante de Abogacía.

Obregón, junto a Luciano Curcio, gran promesa en el ajedrez

El GM (de campera azul) junto con Federico García Lemos, Maestro Fide y Profesor de la escuela Grau, analizando partidas.

La escuela Municipal “Roberto Grau” nació allá por el año 2000 fundada por el Director Carlos Nacer, junto al apoyo de varias personas, que hicieron posible ese sueño de enseñar este gran juego; El ajedrez.

Hoy se encuentra sobre la calle San Martín 347 dentro de las instalaciones de la Escuela 502/503 a media cuadra de la Plaza de Morón centro, ya que en sus inicios, estuvo dentro de diferentes lugares, como la Escuela de Danzas José Neglia, entre otras.

Lleva más de 23 años abriendo sus puertas a la enseñanza, viendo pasar a varias generaciones, preparando talentos y por sobre todo, compartiendo momentos inolvidables.

En dialogo con Carlos Nacer, Docente y Director de la Escuela Municipal “Roberto Grau” nos resaltó la importancia que tiene este juego

“El ajedrez es un juego milenario para niños y adultos, que desarrolla capacidades y hay que tomarlo como una potente herramienta educativa”

“Permite desarrollar capacidades de razonamiento lógico, deductivo y de observación. También es muy importante para implementarlo en la toma de decisiones”

Carlos Nacer, Director de la Escuela municipal de Ajedrez de Morón

“Permite interactuar, la socialización y aceptar las derrotas, para poder tomarlas como aprendizaje. En niños en etapa de desarrollo, desde los 5 años en adelante, produce una estimulación temprana, tanto cognitiva, como afectiva, porque aprenden lo que es jugar, tomándolo como lo que es; un juego.

Créditos: Andrés Pelozo