Una crisis de representatividad del régimen político
Por Jorge Altamira, Política Obrera
La designación de Silvina Batakis para el Ministerio de Economía que abandonó Martín Guzmán, es una solución de compromiso que durará lo que un suspiro. En esencia, es un acuerdo de corto plazo para bloquear la propuesta de Massa de copar todas las áreas de gobierno y convertirse en un interventor no electo. Por las relaciones que ha tejido con grupos financieros norteamericanos, Massa era el candidato de la AmCham, la Cámara de Comercio Americana.
La ministra del cristinismo debutó ratificando el acuerdo con el FMI. Con ese fin, Martín Guzmán dejó a Sergio Chodos, el negociador con el FMI, en su puesto. Las declaraciones de Bataakis han dejado al desnudo la hipocresía política de la Cámpora, que había votado en el Congreso, en contra del refinanciamiento del préstamo contraído por Macri con el Fondo.
Batakis no ignora que el reclamo central del Fondo es un aumento del 80% en las tarifas de luz y gas, a lo cual se ha venido oponiendo CFK, la tutora de la flamante ministra. Las declaraciones de Batakis son, además, un guiño a JxC, para seguir co-legislando en el Congreso.
El acuerdo con el FMI, sin embargo, está definitivamente muerto, porque la crisis ha desestabilizado todas las precarias variables económicas y financieras, y porque la crisis política del gobierno “nacional y popular” se ha agudizado.
Más allá de las declaraciones apaciguadoras de kirchneristas y macristas, los punteros de la política nacional están discutiendo el recambio del gobierno. Es la condición para asegurar la transición política por medio de elecciones. El desmoronamiento del oficialismo está acompañado por el desmoronamiento de la oposición y por un desmoronamiento institucional, con epicentro en el Poder Judicial. Argentina atraviesa una crisis de régimen político.
En este marco, Política Obrera reforzará su campaña por un Congreso de Trabajadores que, por medio de un programa política y un plan de lucha, incluida la huelga general, organice a la clase obrera como alternativa de poder.